Adivina, adivinanza. ¿Qué exfolia sin irritar, activa la circulación, mejora la celulitis, aporta energía y dispara las endorfinas, todo al mismo tiempo? Si has leído el título de este artículo sabrás muy bien de qué hablamos: todos esos beneficios son propios de la técnica milenaria del cepillado en seco, o dry brushing.
El origen del cepillado corporal tiene su origen en el Ayurveda. Antiguamente se hacía con guantes de seda, pero hoy en día es más común usar el cepillo o el guante de fibras naturales como el bambú, el cáñamo o las cerdas de cactus. Los movimientos y la intención del cepillado en seco se basan en el tradicional masaje ayurvédico de Aka Garshana, que pretende exfoliar y liberar toxinas.
¿En qué consiste exactamente?
Igual que nos cepillamos el pelo, cepillarnos la piel consiste en pasarnos un cepillo adaptado a esta práctica por la piel para mantenerla sana y cuidada. Lo ideal es hacerlo por la mañana (ya que tiene propiedades estimulantes), y usar un aceite corporal – aunque si no tienes aceite, funciona igual de bien.
Empieza por los pies y cepilla con movimientos firmes o circulares hacia la zona del corazón. A continuación haz lo mismo pero de las manos hacia el corazón. Cuando llegues a la zona del estómago, cepíllate en el sentido de las agujas del reloj. Es importante siempre cepillarse con cuidado. Lo último que queremos hacer es irritar nuestra piel, así que asegúrate también de que el cepillo que utilizas es suave. El cepillado debería durar entre 3 y 5 minutos. Céntrate en la práctica mientras lo haces. Es un buen ejercicio de mindfulness.
¿Para qué sirve?
Muchos tratamientos de exfoliación son agresivos con la piel. La función principal de esta práctica es hacer lo mismo pero sin dañar la piel en el proceso. Según los expertos, el cepillado en seco mejora la apariencia de la piel porque elimina sus capas superiores al debilitar los lípidos que los unen. Así, se eliminan las células de la piel opacas y muertas, revelando unas células sanas en la piel.
Y aunque no consigue acabar con la celulitis, la estimulación de la circulación causará la vasodilatación de la zona y la piel se verá temporalmente más firme, haciendo que la celulitis sea menos visible.
“Los amantes de esta técnica milenaria consideran que sus beneficios van más allá de la piel, y cuando se estimula el sistema linfático y se eliminan las toxinas del cuerpo, hay quienes llegan a sentir una experiencia increíblemente relajante que le ayuda a liberar el estrés” (MujerHoy)
Es una muy buena manera para activar la circulación y por eso se recomienda hacerlo por la mañana, para despertarnos. El cepillado dispara la emisión de endorfinas y nos ayuda a empezar el día con muy buena energía.
¿Qué tipo de cepillo debo utilizar?
Lo ideal es usar un cepillo de cerdas naturales que tenga un mango fácil de agarrar. Hazte este masaje por la mañana antes de la ducha y cuando salgas, termina con una buena crema hidratante como lo harías con cualquier otro método de exfoliación.
Nosotros te recomendamos que uses nuestro cepillo de baño, hecho con materiales naturales. Sus dos piezas independientes, mango y cepillo, pueden separarse y te permitirán llegar a todas las zonas de la espalda o utilizarlo para el resto del cuerpo.
Esta técnica no está recomendada para pieles sensibles y no se debe practicar más de tres veces por semana. Al hacerlo, deberemos tener en cuenta las partes del cuerpo por las que pasamos el cepillo y el tipo de piel que tenemos en cada una de ellas. Cuanto más sensible sea la zona, menos fuerza deberemos aplicar.