¿Cuántas veces has olido algo y te has visto teletransportada a un momento concreto en tu vida? Y es que los olores no son solo olores: son recuerdos. Desde el olor de un perfume hasta el olor que deja la lluvia en el asfalto después de un día caluroso.
A diferencia del tacto o del gusto, los olores son capaces de activar todas las regiones emocionales del cerebro; esto es debido a la interconexión de las regiones cerebrales implicadas en el procesamiento de ambas sensaciones, siendo el sistema límbico -y en especial la amígdala- el centro integrador por excelencia. Pero no sólo eso. Los aromas también pueden ayudarnos a sentirnos mejor.
La lavanda es un aroma que ayuda a relajarnos. Su poder es tal que puede calmar la mente y el cuerpo en cuestión de un instante. Además, puede ayudar a tratar el insomnio. En un estudio realizado a 42 mujeres universitarias, se descubrió que este aroma aliviaba eficazmente los problemas de sueño y la depresión de las participantes.
¿Sabías que la canela es un aliado a la hora de mejorar nuestras funciones cognitivas? Así es. El aroma de canela puede mejorar nuestras respuestas visuales-motoras, nuestra memoria, nuestra capacidad de atención, y ¡hasta nuestra creatividad!
Si buscas algo que te ayude con tu ansiedad, el pino puede ser tu amigo. En un estudio japonés, los participantes que se daban un paseo por bosques de pinos mostraban unos niveles de depresión y estrés mucho más bajos que los demás. Esta investigación también descubrió que los sujetos ansiosos tenían una mayor sensación de relajación después de inhalar este el aroma.
Resulta que el aroma a césped recién cortado puede hacerte más feliz. La sustancia química liberada nada más cortar el césped puede hacer que nos sintamos mejor y más relajados. Este aroma también puede prevenir el deterioro mental que a menudo viene acompañado del envejecimiento.
Si buscas tener un poco más de energía, olvídate de la taza de café y opta por los cítricos. El limón y la naranja no sólo son conocidos por sus propiedades ricas en vitamina C, sino que el simple hecho de olerlos puede ayudar a aumentar nuestros niveles de energía.
Oler menta está relacionado con una mayor motivación y rendimiento general. Conocida por vigorizar la mente, se ha utilizado incluso como ayuda para los estudiantes a la hora de hacer exámenes.
El aroma a jazmín contribuye a mejorar el estado de ánimo y la salud emocional de quien lo huele. Esto se debe a otro de los principales compuestos que le confieren su agradable aroma, el indol. Este compuesto favorece la producción de serotonina, un neurotransmisor muy relacionado con el bienestar emocional. Por ello, sentir el olor del jazmín genera sensaciones de confianza y optimismo casi inmediatas, y una jovialidad típica de las noches de verano andaluzas.
La vainilla tiene un efecto calmante. Quien percibe una cantidad moderada de este olor, se sentirá más calmado, relajado, como si se encontrase en su propio hogar. También es perfecta para abrir el apetito.
Si tienes migrañas, este aroma es para ti. Un estudio realizado en 2008 demostró que los que encontraban atractivo el aroma experimentaban una notable reducción de los síntomas del dolor de cabeza, así como una reducción de los episodios de migraña. Estudios anteriores sobre el olor de la manzana verde también han encontrado que el aroma puede ayudar a controlar los sentimientos de ansiedad durante los momentos de estrés.